Fue en enero del año 2019, cuando una niña de 13 años de edad, concurrió a Cauquenes para celebrar el año nuevo junto a su familia. Entre ellos estaba un sujeto, a quien la menor lo consideraba como un padre, ya que era pareja de su madre desde que ella tenía tres años. Sin embargo, éste la atacó sexualmente, aprovechando que todo el grupo familiar dormía tras compartir en la fiesta de inicio de año. Los hechos se repitieron hasta el mes de octubre de 2019, donde el sujeto ataca a la menor en un bosque en la comuna de Quirihue con la amenaza de que unos amigos de él le podían hacer daño si contaba lo sucedido.
Tras la presentación del caso en juicio oral de los medios de prueba de parte de la Fiscalía local de esa comuna, se condenó a L.E.D.B., de 31 años.
"El tribunal oral en lo penal de Cauquenes ha decidido condenar por unanimidad a la pena de 15 años y un día de presidio mayor en su grado máximo al imputado acusado por el delito de violación reiterada en persona menor de 14 años, en atención de la acusación y pruebas presentadas por el Ministerio Público que han provocado convicción en el tribunal, al punto de llegar a esta condena", expresó el fiscal Juan Pablo Pereira.
Las alarmas se encendieron cuando la menor develó los ataques a una profesora de su establecimiento educacional, activándose todos los protocolos para denunciar los hechos. A consecuencia de ello su madre siguió emparejada con el autor de los ataques, por lo que decidió echar de la casa a su hija, quien tuvo que irse a vivir a otro lugar junto a una señora que la cobijó. En paralelo a ello, el Ministerio Público ordenó una serie de diligencias que finalmente permitieron llevar a juicio al autor y lograr una sentencia condenatoria en su contra.