Tras casi una semana de paralizaciones y protestas, incluida la huelga de hambre de cuatro profesores, el Ministerio de Educación logró un acuerdo con los docentes de la Región de Atacama, que pausaron sus actividades para reclamar por las malas condiciones en los colegios de la zona.
Las negociaciones culminaron cerca de las 2:00 horas de este jueves con la definición de cinco puntos para destrabar el conflicto, los que serán plasmados en un documento que el ministro Nicolás Cataldo firmará en esa región esta tarde, visita anunciada por el propio secretario de Estado en Cooperativa.
El acuerdo asegura una participación importante de todas las comunidades educativas, tanto para solucionar temas de infraestructura, como en la planificación del rezago pedagógico, que son los asuntos más urgentes.
Una de las primeras medidas será la entrega de una "caja chica" equivalente a 600 mil pesos, para que los directores de las escuelas puedan resolver imprevistos en los recintos, pues una de las quejas principales es que el financiamiento estatal varía dependiendo de la asistencia o la matrícula de los alumnos.
Este monto llegará en paralelo a los trabajos del Mineduc para mejorar la infraestructura, que siguen activos en varios establecimientos.
Respecto a los 16 colegios de Atacama que no pudieron iniciar las clases esta semana, se encargó a las mismas comunidades educativas el dilucidar otra fecha y la jornada escolar más óptima para comenzar el año.