jueves 24 de octubre del 2024
El Diario del Maule Sur
FUNDADO EL 29 DE AGOSTO DE 1937
Hoy
Opinión 24-10-2024
Justicia y pan
Carlos Yáñez Olave
Escritor

Hace tanto tiempo, tantos años, que de verdad parte de este relato me es complicado recordar. Pero hoy debo hacerlo y vencer el silencio, cubierto con una capa oscura que intenta ocultarlo hasta que caiga en el abismo del olvido.

En aquella época solo se comentaba la necesidad de reformar el proceso penal. Fue entonces cuando descubrí lágrimas que despertaron las mías, derramadas por una madre desesperada y desamparada de tres jóvenes que estaban a punto de perder su libertad.

Cerca de su hogar había un pequeño campo deportivo al cual acudían cada tarde para ejercitarse un poco con el balón. Lamentablemente, una nostálgica tarde de verano se hizo presente la necesaria figura de aquel padre que no tenían.

Su tristeza la comunicaron erróneamente a un individuo de mala calaña, quien les ofreció probar la "marihuana" para ahogar esas penas y amargura, una oportunidad fatal para aquellos hermanos, justo cuando se procedía a una redada policial programada para aquella noche. Se comentaba que, después de las pichangas deportivas, algunos jóvenes se quedaban a drogarse.

A los inexpertos hermanos se les acusó de consumo y venta de "cannabis sativa". Los delincuentes profesionales convencieron a los jóvenes de que se culparan de todo, ya que tenían su prontuario limpio (en blanco) y por ello saldrían libres en breve. Fueron condenados a tres años y un día; la condena inundó de llanto, impotencia y locura a esta madre solitaria, abandonada y desamparada de familiares y amistades. No tenía dinero ni patrimonio alguno que le generara ingresos para contratar a un profesional y obtener una defensa que acreditara la inocencia de sus hijos.

Recurrió a un partido político en el cual un amigo era el presidente comunal. Me expuso la tragedia y apelé a mi conocimiento jurídico, conste que no soy abogado. Vi en los ojos de la señora una súplica de llanto sin gemido, pero con lágrimas de su alma herida y su corazón en peligro de destrozarse. Su mirada suplicante, sencilla, impotente y dulce, me inspiró para redactar descargos convincentes y trágicos, revelando su pobreza y desamparo. Noche de llanto y días de súplica de rodillas ante Jesús crucificado en el convento del Corazón de María.

Aunque lo duden, señores lectores, los acusados fueron absueltos y el corazón de una débil y solitaria madre reinició sus normales latidos sin llanto y su alma flameó sonriendo en su interior. Se logró justicia para unos inocentes que hoy son honrados ciudadanos.

La señora madre, al día siguiente, llegó a mi casa con una docena de panes amasados, un sabroso e impactante pago. Fue voluntario y con transparente agradecimiento. Aún siento su abrazo y sus ojos sonrientes cuando se resolvió la libertad.

Hoy recuerdo cuando Andrea Fernanda Yáñez Pinochet, siendo una niña, descubrió en mi viejo escritorio documentos de este drama y le nació el deseo de ayudar a los desvalidos, pobres y necesitados. Por eso confiesa que está estudiando derecho y, además, se tituló hace algunos años como técnico superior de enfermería y ahora postula a CONCEJALA por LINARES.
Freddy Mora | Imprimir | 84