Pri Bruna
CEO Bailab.AI


La reciente aprobación de la ley anti evasión, que exige a los bancos reportar a los contribuyentes con transacciones que superen los 50 abonos de diferentes personas en un mes o 100 en seis meses, presenta un desafío significativo para los emprendedores, especialmente los más pequeños.

Los emprendedores enfrentarán una mayor carga administrativa al requerir un control exhaustivo de las transacciones. Esto no sólo desvía recursos valiosos para su crecimiento e innovación, sino que también aumenta el riesgo de errores involuntarios que podrían resultar en sanciones severas. Además, muchos deberán revisar sus modelos de negocio y cómo reciben los pagos, lo que podría obligarlos a realizar cambios significativos en sus operaciones.

En un momento donde necesitamos fomentar el emprendimiento y la innovación más que nunca, es crucial que las políticas fiscales no se conviertan en barreras para el desarrollo. Si bien estas regulaciones son necesarias, es fundamental brindarle a los emprendedores el apoyo necesario en forma de recursos y herramientas que les permitan adaptarse a estas exigencias sin comprometer su capacidad de innovación.