Personal de la Oficina Municipal de Seguridad Pública de la Municipalidad de Linares, en conjunto con Carabineros, procedieron ayer a la desocupación y demolición de una casa abandonada en Calle Errázuriz número 50.
Obedece a una acción que nació de reclamos de residentes, quienes apuntaban a este lugar como foco de inseguridad, con incivilidades e incidentes entre personas que pernoctaban en el lugar, por lo que fue necesaria una intervención.
Con una labor de desalojo, se sacó a los que quedaban en el inmueble y luego, con maquinaria pesada, se procedió a demoler los muros y estructuras que aún quedaban.
Según se informó, por parte del alcalde Mario Meza, esta medida forma parte del plan para mejorar la seguridad en Linares, haciendo eco de la información proporcionada por personas de manera individual o mediante las juntas de vecinos para reducir los focos de riesgo para la seguridad ciudadana.
Todo, además, en medio de la mayor sensación de intranquilidad, debido a los últimos delitos de alto impacto y connotación social que han afectado al país durante la última semana.