SÓLO QUIERO UN PUENTE
Gabriela Mourgues

De todas las cosas
solo hubiera querido un puente.
Tan largo y perfecto
que atravesara desiertos, ríos, mares, llanos,
bosques y montañas.
Solo un perfecto y bello,
un bien construido puente.
Para saltar la niebla.

Un maravilloso puente
que cruzara todos los abismos,
un puente tan perfecto querría
sin tiempo ni palabras
que fuera sólo música o silencio.
O silencio y música.
Y que se nombrara a sí mismo,
que fuera tan camino y tan playa,
que fuera mar, océano, uno
montaña, túnel.
Que se abriera sin magia ni medida
caminar quisiera ese puente,
alguna vez encontrarlo
a la vuelta de la esquina tal vez,
o en el minuto final.
Más que el sol,
el mar,
el aire,
el último momento.
Que fuera más infinito que la arena,
más amplio que el mar y el idioma de las olas.
Nacer y morir en ese puente
sería perfecto.