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lunes 28 de abril del 2025, Saludamos a Valeria
Opinión 22-11-2022
Valle de Loncomilla, una perla para el turismo internacional
Ricardo Álvarez Vega
Contador auditor
Muy cerca de Linares y siempre dentro de la provincia, encontramos San Javier de Loncomilla - SJL - todo un hallazgo para mí, claro, siempre con un ojo puesto en el turismo que es lo que en definitiva más me convoca.
Ahora, justo cuando escribo estas líneas, SJL cumple 170 años y tuve el gusto de participar de sus celebraciones, muy "regadas" por cierto, por exquisitos mostos que en mi opinión, están lejos dentro de los mejores de Chile y Sudamérica.
SJL se encuentra a 275 km de Santiago, distancia estratégica y luego entenderán a qué me refiero.
La comuna en su totalidad tendría algo así como 45 mil habitantes, que en un muy amplio territorio de más de 1.300 km2 (hay países más pequeños), la deja con una muy baja densidad de poco más de 34 hab/km2.
Hablemos un poco de su historia, pues como siempre digo, un lugar turístico sin un relato histórico es una simple tarjeta postal.
Como ya les dije, SJL fue fundada el 18 de noviembre de 1852 y debe su nombre al santo Francisco Javier y al topónimo Loncomilla que en mapudungun significa "cabeza de oro".
De sus ciudadanos ilustres, que son muchos, el que más me hizo memoria fue don Francisco Encina cuyos tomos y tomos de la Historia de Chile debía leer en la biblioteca del Instituto Nacional.
La localización de SJL no podría ser más estratégica, tanto desde la perspectiva de los ríos como de la interconexión rutera.
Veamos a qué me refiero.
La ciudad está ubicada en la margen derecha del río Loncomilla, que no sólo da el nombre al valle, si no que lo nutre de su recurso hídrico para así generar el clima perfecto para el desarrollo económico de la comuna. Por el suroeste corre el Purapel y muy cerca pasa el gran río Maule.
En cuanto a la interconexión, SJL está apenas a 24 km al sur de Talca, la capital de la región y a 38 km al norte de Linares la capital de la provincia. Pasa por la ciudad la carretera que lleva a Constitución el principal puerto de la región y es el origen de la Ruta Los Conquistadores que lleva a otra capital, la ciudad de Cauquenes. Como ya señalé está apenas a 275 km de Santiago, la capital del país, distancia muy abordable pensando ya en atraer y traer turistas internacionales directamente o de paso con destino al sur.
En definitiva, no resulta para nada una locura diseñar cuál cartas de navegación, rutas y ruteros, incluso con destino a las nevadas montañas del Paso Pehuenche en invierno, con SJL como centro turístico estratégico.
¿Pero qué tiene SJL que me ha embrujado tanto?
Todo, tiene todo, en el entendido que por todo me refiero a potencial fruto de condiciones naturales, culturales, patrimoniales y económicas.
Pará qué me comprendan mejor les daré sólo un ejemplo relacionado con sus afamados vinos.
¿Sabían ustedes que en SJL hay parras de casi 300 años? Bueno ni yo lo sabía, hasta participar de un seminario organizado por la municipalidad donde expusieron reputados investigadores genetistas. Eso, de las parras tri-centenarias no se da ni en Francia, ni en Italia, ni en España o en Portugal, pues como sabrán una plaga de filoxera las mató.
Pero aún estando todo, falta estructurar y poner en orden la casa y sus cosas para recién ahí invitar al turista internacional, pues créanme, no es lo mismo recibir a un chileno que a un brasileño.
Veo las cosas con positivismo en cuanto a la disposición de sus autoridades locales que tienen muy clara la película, eso es muy bueno, pues sin una conciencia y voluntad firme de este nivel, el desarrollo económico que puede generar el turismo internacional jamás será colectivo o sustentable favoreciendo a muy pocos y nunca al pequeño vitivinicultor, al que hace el chivito al palo, a las señoras de las mermeladas, al artesano, etc.
Salud entonces San Javier de Loncomilla, feliz aniversario y que vengan muchos turistas a conocer tus bondades.
Contador auditor
Muy cerca de Linares y siempre dentro de la provincia, encontramos San Javier de Loncomilla - SJL - todo un hallazgo para mí, claro, siempre con un ojo puesto en el turismo que es lo que en definitiva más me convoca.
Ahora, justo cuando escribo estas líneas, SJL cumple 170 años y tuve el gusto de participar de sus celebraciones, muy "regadas" por cierto, por exquisitos mostos que en mi opinión, están lejos dentro de los mejores de Chile y Sudamérica.
SJL se encuentra a 275 km de Santiago, distancia estratégica y luego entenderán a qué me refiero.
La comuna en su totalidad tendría algo así como 45 mil habitantes, que en un muy amplio territorio de más de 1.300 km2 (hay países más pequeños), la deja con una muy baja densidad de poco más de 34 hab/km2.
Hablemos un poco de su historia, pues como siempre digo, un lugar turístico sin un relato histórico es una simple tarjeta postal.
Como ya les dije, SJL fue fundada el 18 de noviembre de 1852 y debe su nombre al santo Francisco Javier y al topónimo Loncomilla que en mapudungun significa "cabeza de oro".
De sus ciudadanos ilustres, que son muchos, el que más me hizo memoria fue don Francisco Encina cuyos tomos y tomos de la Historia de Chile debía leer en la biblioteca del Instituto Nacional.
La localización de SJL no podría ser más estratégica, tanto desde la perspectiva de los ríos como de la interconexión rutera.
Veamos a qué me refiero.
La ciudad está ubicada en la margen derecha del río Loncomilla, que no sólo da el nombre al valle, si no que lo nutre de su recurso hídrico para así generar el clima perfecto para el desarrollo económico de la comuna. Por el suroeste corre el Purapel y muy cerca pasa el gran río Maule.
En cuanto a la interconexión, SJL está apenas a 24 km al sur de Talca, la capital de la región y a 38 km al norte de Linares la capital de la provincia. Pasa por la ciudad la carretera que lleva a Constitución el principal puerto de la región y es el origen de la Ruta Los Conquistadores que lleva a otra capital, la ciudad de Cauquenes. Como ya señalé está apenas a 275 km de Santiago, la capital del país, distancia muy abordable pensando ya en atraer y traer turistas internacionales directamente o de paso con destino al sur.
En definitiva, no resulta para nada una locura diseñar cuál cartas de navegación, rutas y ruteros, incluso con destino a las nevadas montañas del Paso Pehuenche en invierno, con SJL como centro turístico estratégico.
¿Pero qué tiene SJL que me ha embrujado tanto?
Todo, tiene todo, en el entendido que por todo me refiero a potencial fruto de condiciones naturales, culturales, patrimoniales y económicas.
Pará qué me comprendan mejor les daré sólo un ejemplo relacionado con sus afamados vinos.
¿Sabían ustedes que en SJL hay parras de casi 300 años? Bueno ni yo lo sabía, hasta participar de un seminario organizado por la municipalidad donde expusieron reputados investigadores genetistas. Eso, de las parras tri-centenarias no se da ni en Francia, ni en Italia, ni en España o en Portugal, pues como sabrán una plaga de filoxera las mató.
Pero aún estando todo, falta estructurar y poner en orden la casa y sus cosas para recién ahí invitar al turista internacional, pues créanme, no es lo mismo recibir a un chileno que a un brasileño.
Veo las cosas con positivismo en cuanto a la disposición de sus autoridades locales que tienen muy clara la película, eso es muy bueno, pues sin una conciencia y voluntad firme de este nivel, el desarrollo económico que puede generar el turismo internacional jamás será colectivo o sustentable favoreciendo a muy pocos y nunca al pequeño vitivinicultor, al que hace el chivito al palo, a las señoras de las mermeladas, al artesano, etc.
Salud entonces San Javier de Loncomilla, feliz aniversario y que vengan muchos turistas a conocer tus bondades.
Freddy Mora | Imprimir | 595